viernes, 1 de abril de 2016

Ambos lo sabíamos - Laura Mir



Al final del día entré en la habitación pequeña con un cuchillo en la mano, como si aquella estancia fuese una trampa y tuviese miedo, sin un grito, sin una queja.

Dejé el arma en la coqueta, y con rabia empecé a desabrocharme, sin cerrar los postigos, tanto daba.

Me aproximé al somier y crujió un poco, era viejo, como todo lo que nos rodeaba.

Me descalcé y estiré de las medias con fuerza, sin importar si se rompían o no, deseaba en aquel momento, que tras ellas se fuera el resto de mi piel. Notaba frío, estaba helada.

                                                                           Había vuelto a caer.

Tú temblabas vuelto de espaldas, te castañeaban los dientes. No sé si de arriba abajo o de abajo arriba. Tanto daba.

Me aproximé a tu oído y te mentí bajito para animarte:

— No hace tanto frío, es una noche estupenda.

Pero los fríos, ni el tuyo ni el mío, eran exteriores.

                                                                          Habías vuelto a caer.

Me metí en la cama y no pude hacer otra cosa que pegar la cara contra tu espalda, para que pudieses sentir todo lo que llevaba dentro de la jornada,  fue muy dura. También había una gran parte de ti junto al dolor y la sangre que en su retorno, golpeaba de nuevo y con violencia, la sien.

Enrosqué mis piernas a las tuyas y te abracé, con la única intención de calentarnos el corazón y el alma, pero fue imposible, habíamos vuelto a caer y ambos, ambos… lo sabíamos.

Lo sabíamos tan bien como nos conocíamos, entonces sin otra cosa que hacer ante los sinremedios, contradicciones y todos los nones del mundo, rompimos el frío, y nos reímos.



Laura Mir




6 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho este relato Laura, intimo y de tristeza suave. lo he leído con gran placer y me ha encantado el final, como con una sonrisa todo lo oscuro y los fríos desaparecen. Me alegra volver a saber de ti, un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. La risa siempre consigue que regrese la vida.
    Es triste y nostálgico Laura como un amor que se sabe que ha finalizado y aún así se lucha por conservar.

    Me ha gustado mucho.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Bonito relato me agustado mucho
    espero podre leer otr de tus relaso mui pronto un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Intenso y doloroso relato con un final tierno, me ha gustado mucho Laura. Felicidades

    ResponderEliminar
  5. Me da mucha alegría volver a leerte, Laura. Hacía tiempo que no te veía por aquí. Me gustó mucho el relato, saludos :)

    ResponderEliminar
  6. Muchos matices, todos sugeridos, ninguno explícito. Parece que ya conozco a esas dos personas (¿una mujer y un hombre?, ¿dos mujeres?) y el drama de su relación.
    Magnífico, Laura.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar