En esta tarde lluviosa,
a través de este ventanal,
veo gente presurosa
y a otros como si tal.
Los que mucha prisa tienen
sortean a los demás,
sólo ven a los que vienen,
no a los que dejan atrás.
Creo que así es la vida
si te paras a mirar:
Gente que está consumida
por lo que quieren lograr:
resguardo del aguacero,
un negocio que montar,
el poder ser el primero
a donde sea que van,
que no se dan cuenta empero
que sólo miran a ran
de cara a un objetivo
y miran tan y tan
que no ven otro camino.
Y luego están aquellos
que van con paso cansino,
contemplando todo aquello
que les envuelve y rodea,
gozando con lo más bello,
no encuentran la vida fea,
siempre la están disfrutando
por más larga que les sea.
Albert Gran
Hola Albert.
ResponderEliminarUn gran poema a la división existente en la
actitud de los hombres, de cara a la vida.
Una profunda reflexión sobre uno de los males
de esta humanidad, el afán de lucro indiscriminado.
Me ha gustado mucho este magnifico poema.
Un abrazo cordial.
Benjamín.
Buen poema. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarBuen ensayo-poema. Te felicito por el doble trabajo: recopilar las ideas y darle una rima.
ResponderEliminarComo siempre Albert, no dejas de sorprenderme y espero que siempre sea así. Muchas gracias por compartir con nosotros. Un beso.
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